¿QUÉ ES LA SANTA MISIÓN?

  • ES UN MENSAJE DE ALEGRIA Y ESPERANZA
  • ES UN MENSAJE DE LUZ
  • ES UN MENSAJE DE PERDÓN Y MISERICORDIA. Cristo viene a salvar, Cristo viene a curar las enfermedades del alma.
  • ES UNA TREGUA DE DIOS. Viene a ofrecernos LA PAZ.
  • ES UNA PASCUA.  Porque es el paso del Señor, no viene a herir ni a matar a nadie sino a curar y a libertar viene a devolver la vida a todos.

 

            El concilio Vaticano II nos dice: el “OBJETIVO DE LA MISIÓN”es el bien de las almas, es llevarle la luz que les ilumine y la verdad que les mueva a llevar una vida nueva, una vida cristiana, una vida de renovación y crecimiento espiritual. Y así es, porque las instrucciones exhortaciones, actos de piedad, de penitencia, de caridad, etc. Que en estos días se realizan iluminan las mentes, despiertan las conciencias y mueven las voluntades con la gracia de Dios.

            La Misión es considerada como un momento extraordinario de la proclamación de la Palabra de Dios. Extraordinario por el ambiente que se crea, por los temas que se predican, por los agentes pastorales, por los días que se prolongan.

            Es un tiempo fuerte de gracia y de salvación. Toda la vida es tiempo de salvación, pero hay momentos en que esta salvación se ofrece al cristiano de una manera más viva, más urgente, con exigencias inoperativas. Dentro de la vida de la Parroquia, Dios siempre está llamando a la salvación por medio de la predicación.

            La Santa Misión es un estímulo de la gracia de Dios, una llamada fuerte a la conversión.

La misión te ofrece la luz de la predicación, te ofrece la energía de la oración, la medicina de la Confesión y el alimento de la Comunión.

            San Alfonso Ma. De Ligorio dice: “Las misiones son el sostén de la Iglesia, mantienen el fervor, separan la cizaña del buen trigo, fortifica a los débiles, afirman a los fervorosos, levanta a los caídos, disipan los errores y deshacen los engaños del demonio”.

            Son el principal baluarte y auxilio para conservar la y estabilizarla sólidamente sobre la piedra de Cristo, que es la Iglesia. ¡Cuantas gracias nos ofrece Dios en esta Misión!, pero tenemos que poner algo de nuestra parte, nos dice San Agustín: “Dios, que Te creo sin ti, no te salvará sin ti”. Lo que quiere decir, que es indispensable el esfuerzo personal para lograr con la gracia de Dios un cambio de vida. Hay que aceptar y recibir esa Palabra de Dios con docilidad, humildad y buena voluntad. Y todos tenemos que ser misioneros dentro de la Parroquia:

  • Llevando estos mensajes hasta el último rincón de la parroquia,
  • Con su buen ejemplo, asistiendo a los actos de la misión,
  • Con la oración. En estos días rezaremos en comunidad, muchos estarán rezando por nosotros.
  • Con el sacrificio.

 

 

SANTA ANA TELOXTOC